2 autobuses, media de 80 personas, 1 vez al mes, a casi 5 km por hora en algunas etapas, media de 1300 m desnivel, unas 7-8 horas, “veintimuchos” km por etapa, llevamos no sé cuántos de ellos desde el inicio en Donostia…son todo números y números, y yo también contando para cualquier media…A estas alturas de EHO (esta vez son iniciales) lo que me voy llenando es de paisaje, de muy buenas charlas con…, de momentos irrepetibles, del aire en la cara, de lluvia y niebla, nieve, frío, calor…formando parte de días de vida en los que llenarse los pulmones e ir avanzando quedándose con todo dentro, esos cambios de paisaje, de aquellos bosques y ermitas, lomas interminables y valles profundos estamos pasando a tierra más seca y llena de matices.
Inmersa en la larga fila de gente que compartimos estas salidas, caminando, siempre he necesitado largos espacios de tiempo en los que sentirme parte del paisaje, en silencio, ubicándome en el mapa, mirando a lo lejos, abarcando lo recorrido y lo próximo a caminar, despacio…De repente siento la presencia de otras personas y salgo de mi ensoñación, hablamos mientras seguimos acercándonos cada vez más al final de la etapa del día...
Estamos ya en Nafarroa, Cuenca de Iruña, campos de cereal, sol porque nos toca la estación veraniega, parcelarias entre campos, ruinas con historia…Llegaremos a Iruña, Valle de Ollo, Sierra de Satrústegi…¿Kilómetros?, ¿desniveles?, ¿horas?…¿qué es para ti la EHO??...
(MIREN MUÑOZ)
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